IU pide más presupuesto en León para el cuidado de las colonias de gatos y su esterilización.
Izquierda Unida de León local pide mayor implicación del Ayuntamiento para aplicar el Plan CER en las colonias del municipio y responsabilidad a la población leonesa para que no abandone a los animales, y que adopte en vez de comprar.
El éxito de este método de control de las colonias felinas, el plan CER (captura, esterilización y retorno), depende de “la implicación de los grupos políticos de la corporación y el respaldo institucional”, señala Carmen Franganillo, coordinadora local de IU, que ha compartido experiencias con Argos y con particulares que, en muchos casos, se encargan de cuidar, a título personal, algunas de las colonias de gatos que existen en la ciudad, sin presupuesto y con escasa colaboración del Ayuntamiento, que sólo se encarga de la esterilización de algunas colonias. El resto de los gastos del cuidado de las colonias de gatos, y la asistencia a los gatos que son abandonados por sus dueños, lo realiza la asociación ARGOS, con donaciones de particulares y una red de personas voluntarias. Sin embargo, estas tareas corresponden al Ayuntamiento, en concreto a la concejalía de consumo y salubridad, quien debería velar por el bienestar de los animales y por garantizar la salubridad de la ciudadanía”.
Desde IU han reclamado una “mayor implicación por parte del actual equipo de gobierno municipal” para aplicar el método CER, así como un “considerable aumento de la partida presupuestaria destinada al control de colonias de gatos, y adecuación de que actualmente resulta completamente insuficiente”, tal y como han señalado desde la organización. “Además, el hecho de que se prorroguen los presupuestos para el 2023 supone que no habrá partidas nuevas para salud pública, ni para nada en general, lo cual supone un fracaso para el equipo de Gobierno, que no ha sido capaza de negociar unos presupuestos de consenso adaptados al período postpandemia. Aun así, si hubiera voluntad, se podría ampliar la partida para estas cuestiones o hacer un convenio con una entidad sin ánimo de lucro, con presupuestos para cubrir los gastos que ahora tienen quienes lo realizan de manera voluntaria.”
Carmen Franganillo lamenta que se estén “escuchando algunas voces que pretenden acabar con las colonias de gatos ferales. Desde IU no consideran ética esta propuesta, a la vez que es ineficaz, como ya se ha demostrado. Las voces que alegan que los gatos atentan contra la biodiversidad son las mismas que abandonan a los animales en la calle cuando les molestan. El único animal realmente dañino para la diversidad es el ser humano y su numerosas y destructivas intervenciones en la naturaleza. Además, la nueva ley de Protección animal dedica dos capítulos a establecer el marco legal para el tratamiento de las colonias felinas, obligando a su gestión ética y orienta a los poderes públicos hacia su captura, esterilización y al retorno o reubicación de los gatos que las integran (conocidos como método CER y método CES, respectivamente).”