Izquierda Unida de León denuncia la situación actual del sector hostelero leonés

La coordinadora local de Izquierda Unida León ha mostrado su preocupación ante la aparentemente oculta precariedad en el sector hostelero: «Según los últimos datos del INE, el pasado mes de diciembre de 2023 se mostraba un aumento del empleo en el sector hostelero. 18500 personas eran contratadas, un 10% más que en 2022, unos datos aparentemente positivos que encubren otra realidad no tan positiva».

Carmen Franganillo, coordinadora local, ha explicado que «mientras los datos muestran un crecimiento evidente, las condiciones de los contratos no mejoran: y es que un 70% de ellos son temporales y un 30%, a tiempo parcial. Es decir: inestabilidad e insuficiencia. De hecho —ha añadido— el mismo Instituto Nacional de Estadística recoge que el salario medio en el sector hostelero leonés es de 1000€ brutos, 200€ por debajo del Salario Mínimo Interprofesional mientras que el IPC del mismo sector ha aumentado un 8% en el último año».

Desde la organización han afirmado que «esta aparente incongruencia se explica muy fácilmente si atendemos a la fragilidad estructural del sector que se intenta sostener bajo una evidente desigualdad en la distribución de los beneficios».

De esta forma, IU León local ha querido dar voz a «todas las evidentes desigualdades que los trabajadores de este sector, al que tanta importancia se le da en la ciudad, tienen que sufrir, no solo respecto a su salario, sino a la falta de derecho de vacaciones pagadas y permisos retribuidos y al aumento de la carga de trabajo y presión por parte de las empresas. Una serie de elementos que generan estrés y agotamiento en la plantilla, lo que puede derivar en mayores problemas de salud física y mental».

«Además —continúan— dicha desigualdad también se muestra entre las grandes empresas y los pequeño negocios, pues la recuperación económica beneficia principalmente a las grandes cadenas y franquicias, mientras que los pequeños negocios locales siguen luchando por sobrevivir. Así, los beneficios del sector se concentran en un pequeño número de empresas mientras que la mayoría de los trabajadores se ven abocados a la precariedad».

La agrupación de izquierdas ha querido subrayar «una vez más, la importancia de tener en cuenta la fragilidad de este sector, que ya sabemos depende del turismo, que, a su vez, es altamente vulnerable a las crisis económicas, pandemias, estacionalidad y otros factores externos». «La economía leonesa —prosiguen— no puede ni debe basarse únicamente en el sector hostelero, es necesario diversificar la actividad económica para crear un modelo más resiliente».

Finalmente, la organización ha exigido la implantación de una serie de medidas que luchen contra tantos inconvenientes y falta de igualdad: «primeramente, creemos urgente y esencial las ubida del SMI hasta alcanzar los 1.500 euros brutos mensuales, según regula el Ministerio de trabajo; en segundo lugar, una reforma laboral que incluya la derogación total de la reforma laboral del PP y apuesta por un modelo que priorice la estabilidad y los derechos de los trabajadores; en tercer lugar, la lucha por la diversificación económica que dé impulso de otros sectores económicos en León para reducir la dependencia del turismo y crear un modelo económico más sostenible; por último, un aumento de las inspecciones en el sector hostelero, que ayuden a crear estabilidad y condiciones dignas para los trabajadores».

Para concluir, han querido defender que «si el IPC crece no puede ser a costa de la sobreexplotación que unos pocos ejercen sobre cientos de trabajadores. Es hora de que las administraciones públicas tomen medidas para garantizar un sector hostelero justo, sostenible, resiliente y que dignifique el trabajo. No podemos basar la economía de León en un sector tan frágil como la hostelería, es necesario diversificar la actividad económica y crear un modelo más sólido a largo plazo».