Izquierda Unida denuncia la precariedad laboral y la dependencia de sectores precarizados en León, tras estudiar los datos de la EPA.
Izquierda Unida de León local ha denunciado la precariedad laboral y la dependencia de sectores precarizados en la provincia.
La coordinadora local de la formación, Carmen Franganillo, ha recordado que “el anuncio del expediente de regulación de empleo de la empresa H&M en España, que afectará a tiendas de la provincia, es solo un ejemplo de la situación que se vive en León”.
“La provincia de León se encuentra sumida en una crisis económica y social que tiene su origen en un modelo productivo basado en la desindustrialización y la dependencia de sectores precarizados”
ha asegurado Franganillo. “Esta situación tiene un impacto especialmente negativo en las mujeres, que son las que se encuentran en mayor situación de vulnerabilidad”, ha añadido. “Existe una deuda histórica en materia económica y de desarrollo con esta provincia”, explican desde la organización.
Según los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) del cuarto trimestre de 2023, la tasa de paro en León se situó en el 10,8%, por encima de la media nacional (8,5%). La tasa de paro femenino fue del 14,3%, casi dos puntos porcentuales superior a la masculina (12,5%).
La tasa de temporalidad en León también es elevada. En el cuarto trimestre de 2023, el 32,1% de los asalariados en la provincia estaban contratados de forma temporal, frente al 27,9% de la media nacional. La tasa de temporalidad femenina fue del 36,4%, frente al 27,7% de la masculina.
“La precariedad laboral tiene un impacto directo en la calidad de vida de las personas”, ha señalado Franganillo. “Las personas trabajadoras precarias tienen menos ingresos, menos derechos y una mayor inseguridad en el empleo. Una inseguridad que, por un lado, pone en riesgo la salud mental de la población: al final el trabajo es una necesidad, y quien no lo tiene asegurado puede desarrollar problemas de estrés y ansiedad que con un contrato fijo y cierta tranquilidad/estabilidad quizá no tendría. Por otro lado, desemboca en la emigración de la población, en especial joven, no solamente al extranjero, sino a provincias cercanas que ofrecen mejores condiciones o, al menos, un futuro menos incierto”, ha añadido.
Para finalizar, Franganillo ha incidido en la necesidad de “apostar por un modelo económico más justo y sostenible, que genere empleo de calidad y que garantice un mayor nivel adquisitivo a la población, y más facilidades para acceder a un empleo digno”. “Desde Izquierda Unida estamos trabajando para construir ese modelo”, ha concluido.